Escrito por Laura | 3 de abril de 2020
El delicado arte de la relojería cuenta con una larga historia. Desde el siglo XV, relojeros magistrales han ido fabricando relojes en miniatura. De hecho, los primeros relojes diseñados para llevarlos eran en realidad colgantes más que relojes de pulsera. Si bien con el tiempo los estilos han cambiado y se han fundado nuevas marcas relojeras, algunas de las primeras siguen hoy fabricando relojes. Hemos retrocedido en el tiempo para conocer los nombres de los relojes más antiguos que existen y para averiguar dónde están ahora
Vacheron Constantin
Aunque fundada veinte años después de la marca de relojes registrada más antigua del mundo, Vacheron Constantin es el fabricante de relojes más antiguo que existe con una producción ininterrumpida. Muchos otros fabricantes clásicos de relojes mecánicos han tenido períodos de inactividad a lo largo del tiempo o bien se han visto obligados a vender su marca debido al auge de los relojes de cuarzo, menos costosos. Fundada en 1755 en Ginebra, Vacheron Constantin es célebre desde entonces por la excepcional calidad, artesanía y alto precio de sus relojes.
La marca creó el 57260 Reference, actualmente considerado como el reloj más complejo jamás fabricado, con 57 complicaciones y 2800 componentes decorados. Se diseñó para el 260.º aniversario de Vacheron Constantin y está valorado en 8 millones de euros, lo que lo convirtió en uno de los relojes más caros de ese año.
Está considerado como uno de los relojes más complejos jamás fabricados
Ferdinand Berthoud
Ferdinand Berthoud abrió su taller en París, allá por 1753. Pero Berthoud no era un relojero convencional; también era un científico. Trabajó para la marina francesa y fue uno de los inventores detrás del cronómetro marino; un dispositivo utilizado para determinar la posición este-oeste de un barco en el océano.
La familia Berthoud llevaba más de un siglo creando relojes y cronómetros, pero en 1876 sufrieron una tragedia; la muerte del heredero Charles-Auguste Berthoud, que llevó a la desaparición de la marca de la mirada pública. No obstante, en 2015 se relanzó Ferdinand Berthoud con un nuevo reloj: el Chronomètre Ferdinand Berthoud FB1. Con este reloj la empresa rindió homenaje al trabajo de toda la vida de su fundador y contribuyó a revivir su marca homónima.
Ferdinand Berthoud como marca renació tras el lanzamiento del Chronomètre Ferdinand Berthoud FB1
Jaquet Droz
Pierre Jaquet-Droz empezó a fabricar en 1738 en La Chaux-de-Fonds, Suiza. Siendo un hombre inventivo e imaginativo, creó relojes y autómatas: obras de arte mecánicas que incorporaban música y movimiento. Su trabajo fue especialmente popular entre los ricos de Europa y China.
Esta popularidad duró hasta las Guerras Napoleónicas, a inicios del siglo XIX, las cuales pondrían fin a la prosperidad de la marca. Se tuvo que esperar hasta el año 2000 para que la empresa resurgiera, cuando fue adquirida por el Grupo Swatch. Desde entonces se ha ido presentando una serie de relojes, que marcan el comienzo de una nueva era para Jaquet Droz.
Un reloj Jaquet Droz
Para esta empresa relojera todo empezó con la familia Favre. En 1737 Abraham Favre se registró como relojero en Le Locle, Suiza. En las décadas siguientes, su hijo y nietos siguieron dirigiendo el negocio por su cuenta, hasta que Auguste Leuba, que procedía de una familia de comerciantes y relojeros, se unió a la compañía en 1815. A partir de entonces, la empresa pasaría a conocerse como Favre-Leuba.
El lema de la marca era crear relojes ‘para quienes conquistan las fronteras’, como ellos hicieran. Su clásico reloj Bivouac se presentó por primera vez en 1962 y fue el primer reloj de pulsera en medir la altitud y la presión del aire, por lo que es especialmente popular entre alpinistas y pilotos. Si bien la crisis en la industria relojera suiza en los años 1980 comportó que los propietarios tuvieran que vender la marca, Favre-Leuba está de regreso desde 2011 y aún cuenta con una buena consideración en el sector.
Blancpain está considerada como la marca relojera registrada más antigua del mundo. Se fundó en 1735, cuando Jehan-Jacques Blancpain abrió el taller de la empresa en la planta superior de su casa en Villeret, Suiza.
La marca es sinónimo de tradición e innovación. Uno de sus modelos más famosos es el reloj de buceo Fifty Fathoms, presentado por primera vez en 1953. Se fabricó a petición de la marina francesa, que necesitaba un reloj fiable para sus operaciones submarinas. Blancpain ha conocido períodos de inactividad, pero la marca renació en 1983. Ahora es parte del Grupo Swatch, y es socia y patrocinadora de Lamborghini.
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